¿Ya entraste en pánico? Pues créeme, no es momento para esto. Como opositor, ahora mismo necesitas preparar la oposición con los 5 sentidos, para conseguir los resultados que esperas.
Ya sabrás que bajo estrés, la memoria puede jugar malas pasadas y por eso, tienes la sensación de que lo has olvidado todo (aunque no sea completamente cierto). Y no solo te ocurre con el temario, también se olvida todo lo demás… ¡Incluso el camino que ya recorriste hasta ahora!
El último mes antes de examinarte es clave si quieres terminar de pulir tu preparación y por lo tanto, toca fijarse en los detalles.
No, no es momento de la gran “panzada” a estudiar, ni de hacer todo lo que hasta ahora no habías hecho.
Se trata de mantener el ritmo, pero poner el foco en controlar los pequeños detalles que te harán brillar en la oposición.
Y por eso, en este artículo, quiero compartir contigo recursos e ideas para preparar la oposición y perfeccionar las técnicas que te conducirán al éxito.
Para empezar, quiero contarte las cosas que son vitales para rendir al 200% el día de tu examen.
En el siguiente vídeo, vas a descubrir los aspectos de tu preparación a los que darles unos cuidados extra el último mes antes de tu oposición.
¡Dale al play!
Recursos para preparar la oposición en la recta final
Ahora que viste el vídeo, tienes más claro en qué enfocarte, pero seguramente te preguntes… ¿Y cómo voy a hacerlo?
Es decir, cómo puedes trabajar cada una de estas áreas, o qué herramientas y recursos tienes para seguir mejorando cada uno de esos aspectos que te haga rendir al máximo en tu oposición.
Y es más sencillo de lo que piensas, porque la mayoría de lo que necesitas, ¡ya lo tienes! Es solo que el estrés y la ansiedad te hacen olvidarlos, o pasarlos por alto.
Por eso, a continuación vamos a ver de dónde puedes rescatar todos esos recursos que te ayudarán a enfocarte en lo importante para preparar tu oposición en la recta final.
Y para ello haremos un “viaje” en 3 etapas…
#1 No pierdas de vista tus inicios
Cuando inicias tu preparación hay muchas cosas que desconoces, sobre todo de ti mismo como estudiante y opositor. A medida que vas avanzando, te vuelves más consciente de tus fortalezas, pero también de tus límites o de lo que más te cuesta.
Y eso es genial, porque vas armando una preparación “a tu medida”.
Además, es un momento en el que más expandes tu horizonte y te abres a probar y experimentar nuevas ideas o fórmulas, no solo de estudio o memorización, sino que también buscas cómo mejorar en otras áreas que también son clave para ti como opositor.
Me refiero a la mentalidad, a la gestión del tiempo, a la planificación, etc.
Por eso, en este punto de tu oposición, lo que te recomiendo es que vuelvas la vista atrás y recuperes algunas de esas claves que aprendiste al principio.
Puede que en su momento no acabaran de encajar contigo y las hiciste a un lado, está bien. Pero, releyendo tus notas, por ejemplo, puede que encuentres “perlas” que te ayuden cuando más lo necesitas.
Es lo que suele ocurrir con los libros… La primera lectura te da una visión general, pero casi no percibes los detalles, o solo los que en ese momento están más alineados contigo.
Pero el tiempo pasa, tú evolucionas y la segunda lectura es totalmente distinta. Lo mismo puede pasarte al preparar tu oposición en la recta final. Igual una de esas ideas que descartaste en un momento concreto, ahora te sirven.
Por ejemplo, probar la meditación o el mindfulness, si es que hasta ahora te has resistido. O utilizar un método diferente de planificación y control del tiempo como el Time Blocking.
Tus circunstancias cambian y por lo tanto, puede que quieras darle una “segunda” oportunidad a ciertas habilidades o conocimientos que ya tienes, pero que no estabas aplicando.
Y para que tengas muchas más ideas de por dónde comenzar a trabajar cada área importante, te dejo un artículo del blog que escribí hace un tiempo: Todo lo que un opositor necesita en su día a día.
#2 Recuerda dónde flaqueaste anteriormente
A medida que los días y los meses pasan, seguro que como opositor te has encontrado con dificultades para seguir el ritmo y avanzar como querías a la hora de preparar la oposición, ¿verdad?
Es normal, porque no todos los días estamos a tope y además, la vida ya se encarga de entrometerse.
Pero, ¿qué aprendiste de cada uno de esos “tropiezos” o reveses?
Por ejemplo, estudiar o planificar el verano suele ser una época que nos deja muchas enseñanzas… Incluso si no lograste seguir tu plan y pusiste en standby tu preparación.
Analiza por qué te ocurrió, qué hubieras necesitado para seguirlo y todo esto te dará un conocimiento basado en la experiencia. Y lo más importante, en ti mismo.
De esta forma, no necesitas soluciones genéricas que pueden funcionar o no, sino que lo que sea que decidas probar, estarás seguro de que encaja contigo.
Si hasta ahora los repasos no se te han dado bien, piensa en por qué no encajan contigo y cómo podrías hacerlo para que te funcionase. Igual dándole una pequeña vuelta, consigues cambiar los resultados y los repasos se acaban convirtiendo en tu as bajo la manga.
Por supuesto, también sirve todo aquello que ya te ha funcionado. No lo dejes de lado y sigue aprovechándolo a tu favor, ya sea una técnica de estudio concreta. O una rutina que has ido modelando con el tiempo y se adapta a ti y a tus circunstancias.
Lo más importante en este caso es que recuerdes que como opositor, ya has pasado por algunas “crisis”, pero si has seguido hasta ahora, eso significa que, de alguna manera, te has hecho más fuerte.
Reconoce estas fortalezas y sácales el máximo partido. Y sobre todo, prepárate por si llega una de esas a última hora para saber cómo afrontarla, sin poner en riesgo todo el camino que has recorrido hasta aquí.
#3 El empujón final para preparar la oposición
Vamos a ver ahora otro tipo de recursos que te ayudarán a recorrer esa milla extra.
Por un lado, ahora más que nunca debes trabajar 2 claves importantes para afrontar en forma la oposición: la motivación y la autoconfianza.
Con estas 2 claves, tu mente estará clara y enfocada en lo que es importante y podrás convertir toda esa energía extra de último minuto y canalizarla de forma positiva para pulir tu preparación.
Por otro lado, en este momento, es bueno que, haya sido como haya sido el ritmo para preparar la oposición, ahora “aprietes” un poco más. Ojo, con esto no me refiero a echar más horas, ni a hacer por hacer.
Todo lo contrario, sino a conseguir que tu tiempo, que recuerda que vale oro, realmente produzca los mejores resultados… Porque lo dedicas a lo más importante.
Para lograrlo, puede ayudarte este artículo donde te comparto las 3 reglas de oro para ser más productivo como opositor.
Y por supuesto, tienes que tratar por todos los medios de vencer el cansancio acumulado, la desidia y la pereza. Si esta es tu asignatura pendiente, trata de intentar mejorar un poco cada día tu disciplina.
Por último, te diría, tal como te adelanté en el vídeo, que no pienses solo en la meta que tienes a un mes vista, sino en un paso más allá.
Es como si agarras la meta y la retrasas 10 metros. Esos metros extra son para preparar la post-oposición. Con esa visión no solo del momento del examen, sino también el de después, te sentirás mucho más tranquilo y enfocado, sabiendo que lo tienes bajo control.
Y puede que incluso… ¡te dé alas! No, no de las físicas, pero sí ese empuje adicional de motivación por la recompensa que te espera.
¿Te parecen suficientes herramientas y recursos para terminar de preparar la oposición?
Igual a medida que leías, te has dado cuenta de todo el recorrido que has hecho hasta aquí y te ha sorprendido. Enhorabuena, ese es parte del objetivo de este artículo.
Definitivamente, poner en valor todo tu esfuerzo hasta ahora te impulsará a seguir ahora que la oposición está tan cerca. Así que, aprovecha este empujón y vamos con todo a por tu plaza.